Salimos puntualmente y tras un ratito de camino, un par de mareos y poco más llegamos a nuestro destino. Allí nos esperaban los monitores de la granja que nos atendieron de manera increíble. Nada más llegar tomamos un tentempié y tras hacer grupos de 15 niños y niñas, comenzaron las actividades propias de la granja: buscar comida en la huerta, alimentar a los animales...
Con estas tareas se fue gran parte de la mañana y tras un pequeño descanso (por llamarlo de alguna manera, porque descansar, lo que se dice descansar, descansaron poco...) tomamos el almuerzo.
Después de éste dimos un paseo por los alrededores y, finalmente, elaboramos pan, merendamos y... vuelta a casa después de un día intenso y con muchas emociones vividas.
Un día en la granja-escuela - diapositivas
(Para escuchar la música del montaje fotográfico situarse encima del mismo y pulsar el icono de volumen)
Así plasmaron su experiencia a la vuelta.
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